Un violento episodio sacudió la noche del pasado jueves 10 de julio en el exterior de una discoteca en el centro de Zaragoza. Una mujer fue detenida por la Policía Nacional tras arrancar de un mordisco la parte distal de una falange a otra mujer durante una pelea desatada por celos. El conflicto comenzó cuando la víctima sorprendió a su novio besándose con la agresora, lo que desencadenó una discusión que terminó en tragedia.
Según fuentes policiales, la pelea ocurrió en la calle María Lostal, y la falange seccionada no pudo ser localizada para una posible reimplantación. La víctima fue trasladada de urgencia a un centro hospitalario, mientras que la agresora, acusada de un delito de lesiones graves, fue puesta en libertad con cargos tras comparecer ante el Juzgado de Instrucción de guardia. Este incidente se suma a un aumento del 12% en agresiones en zonas de ocio nocturno en Zaragoza durante el primer semestre de 2025, según la Delegación del Gobierno en Aragón.
Expertos señalan que el consumo de alcohol y emociones intensas, como los celos, son catalizadores de este tipo de violencia. “El alcohol desinhibe y puede provocar reacciones desproporcionadas”, explica el criminólogo Carlos Martínez. La comunidad zaragozana queda conmocionada mientras se espera el desarrollo del proceso judicial.
Expertos señalan que el consumo de alcohol y emociones intensas, como los celos, son catalizadores de este tipo de violencia. “El alcohol desinhibe y puede provocar reacciones desproporcionadas”, explica el criminólogo Carlos Martínez. La comunidad zaragozana queda conmocionada mientras se espera el desarrollo del proceso judicial.
